
La mayoría de los relojes deportivos ofrece resistencia a las salpicaduras y al sudor, certificada mediante el índice IP con un IPX4 o superior, lo cual te garantiza su perfecto funcionamiento incluso cuando empiece a llover mientras entrenas o lo salpiques con agua al refrescarte o al beber agua.
Otros modelos amplían esta protección con un mayor índice de estanqueidad con IPX7 o IPX8, lo cual te permite realizar ducharte con él sin problemas e incluso nadar. Capítulo aparte merecen los relojes deportivos diseñados para deportes náuticos o para natación. Estos soportan sin problemas inmersiones más allá de los 3 metros ya que cuentan un sistema de sellado mucho más sofisticado.
Atención si un reloj indica simplemente ‘resistente al agua’, quiere decir que solo es resistente a salpicaduras.
El reloj de buceo o reloj sumergible es parte del equipo básico de todo buceador. También cuando realizamos snorkeling es interesante disponer de un reloj de buceo. Hay varios tipos disponibles, desde modelos analógicos sencillos a modelos digitales que también indican la profundidad y el tiempo de buceo. Para los más exigentes existen relojes con un sinfín de datos incorporados.
La impermeabilidad se indica por los metros a los que el reloj puede sumergirse. A veces esa impermeabilidad se muestra en Bar o Atmósferas, en que 10 bar o 10 atm es igual a 100 metros de profundidad.
Hoy en día la mayoría de los relojes de buceo son resistentes al agua hasta los 200 metros (20 bares/atm).
Una característica de un reloj de buceo clásico es por supuesto el aro giratorio. Este aro se llama también bisel. Casi todos los relojes de buceo analógicos tienen uno. El aro gira solamente hacia la izquierda (sinistrorso) y está graduado en minutos. Este marcador se pone, al entrar en el agua, en la aguja grande del marcador del tiempo. Así se puede leer de forma instantánea y precisa durante el buceo cuanto tiempo usted ya está buceando.
Relojes sumergibles recomendados
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